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Última revisión
24/07/2024

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¿Cuáles son los instrumentos y medidas que deben adoptarse para la prevención de riesgos térmicos?

Tiempo de lectura: 6 min

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Vademecum: prevencion

Fecha última revisión: 22/07/2024

Resumen:

Existe una gran variedad de instrumentos para medir directamente la velocidad del aire, la temperatura o la humedad. Estos instrumentos se dividen principalmente en los que miden la velocidad del aire, como los termoanemómetros, anemómetros de hilo caliente y anemómetros de rotación, y los que miden la humedad, como los higrómetros, psicrómetros, termómetros de bulbo y termopares.

A fin de prevenir estos riesgos, se deben tomar medidas como eliminar las fuentes de aire caliente o frío, aislar las superficies calientes, usar ropa con aislamiento térmico, ingerir líquidos de forma frecuente, etc. Además, se deben evitar las corrientes de aire, reducir la carga física del trabajo y también mejorar el diseño de la ropa. Por último, la organización del trabajo también juega un papel importante para evitar los riesgos térmicos, como planificar descansos periódicos o programar rotaciones para realizar tareas de mayor esfuerzo.


Instrumentos de medida del estrés térmico

Los medidores de estrés térmico detectan la temperatura y la clasifican en relación con la humedad o valor con denominación estándar mundial WBGT (Wet Bulb Globe Temperature Index).

Miden el índice de estrés térmico, que se compone de tres parámetros: temperatura de evaporación, temperatura del bulbo y temperatura del aire.

A TENER EN CUENTA. La norma UNE-EN ISO 7726:2002 establece los requisitos que deben cumplir los instrumentos de medida de las magnitudes físicas de los ambientes térmicos.

Existe gran variedad de instrumentos para medir directamente la velocidad del aire, la temperatura o la humedad. Aquí realizaremos una breve descripción de los tipos principales, centrándonos en su rango de aplicabilidad, los accesorios que pueden tener implementados, así como las ventajas e inconvenientes de cada uno de los tipos:

1. Instrumentos que miden la velocidad del aire:

    • Termoanemómetro digital de hilo caliente con medición de temperatura, humedad y velocidad del aire y termoanemómetro de bola con detalle de sus sondas respectivas. Los primeros están integrados por dos sensores másicos de caudal de convección térmica; uno de ellos está caliente y el otro a temperatura ambiente. La diferencia de temperatura (medida como voltaje o intensidad de corriente) es una magnitud directamente proporcional a la velocidad (y caudal) del fluido. Los sensores que operan a temperatura constante disponen además de un regulador que mantiene la temperatura. En este caso, se mide la corriente requerida para mantener esta temperatura, siendo también proporcional a la velocidad del fluido. La mayoría de los termoanemómetros usan el primer sistema porque muestra tiempos de respuesta menores (alrededor de 5 segundos), tienen una línea de base más estable y un rango de temperaturas de trabajo más amplio. En cuanto a la posición dentro del conducto es importante evitar las turbulencias, que pueden rendir resultados por exceso. Algunos fabricantes aconsejan medir a una distancia mínima de 10 diámetros aguas abajo y 4 diámetros aguas arriba de cualquier punto crítico.
    • Anemómetros de hilo caliente. Son instrumentos complementarios a los anemómetros de aspas giratorias, ya que su rango dinámico se extiende básicamente de 0 a 1 m/s. Proporcionan una estimación instantánea de la velocidad en un punto del espacio; por consiguiente, es necesario utilizar valores medios en el tiempo y en el espacio. Son instrumentos muy sensibles también a la dirección del aire, de manera que los anteriores comentarios sirven iguales en este caso. Finalmente, la medición es solo correcta desde el momento en que la temperatura del instrumento alcanza la del ambiente que tiene que medirse. 
    • Anemómetro de rotación. Está dotado de cazoletas (Robinson) o hélices unidas a un eje central cuyo giro, proporcional a la velocidad del viento, es registrado convenientemente; en los anemómetros magnéticos, dicho giro activa un diminuto generador eléctrico que facilita una medida precisa.

2. Instrumentos para medir la humedad:

    • Higrómetro: es un instrumento que determina la cantidad de humedad relativa que hay presente en el aire atmosférico.
    • Psicómetro: indica la temperatura húmeda y seca.
    • Termómetro de bulbo: para medir el influjo de la humedad en la sensación térmica. Junto con un termómetro ordinario forma un psicrómetro, que sirve para medir humedad relativa, tensión de vapor y punto de rocío. Se llama de bulbo húmedo porque de su depósito parte una muselina de algodón que lo comunica con un depósito de agua. Este depósito se coloca al lado y más bajo que el bulbo, de forma que por capilaridad está continuamente mojado.
    • Termómetro de globo: para medir temperatura radiante. Consiste en un termómetro de mercurio que tiene el bulbo dentro de una esfera de metal hueca, pintada de negro de humo. La esfera absorbe radiación de los objetos del entorno más calientes que el aire y emite radiación hacia los más fríos, dando como resultado una medición que tiene en cuenta la radiación. Se utiliza para comprobar las condiciones de comodidad de las personas.
    • Termopares, par térmico o termómetros de contacto: se trata de termómetros que miden la temperatura a partir de una resistencia eléctrica que produce un voltaje el cual varía en función de la temperatura de conexión. Es un termómetro de toma la temperatura de forma rápida y se suelen usar en laboratorios. Un termopar o termocupla es un dispositivo utilizado para medir temperaturas basadas en la fuerza electromotriz que se genera al calentar la soldadura de dos metales distintos. Su principal inconveniente es la necesidad de calibración al sustituir los termopares.

Medidas de prevención frente a riesgos térmicos en el lugar de trabajo

Para prevenir los riesgos térmicos en el lugar de trabajo, se prevén las siguientes medidas:

1. Temperatura del aire:

    • Localizar las fuentes de calor o frío en la periferia.
    • Eliminar las fuentes de aire caliente o frío.
    • Aislar las superficies calientes.
    • Extracción localizada del aire caliente o frío.
    • Ventilar evitando corrientes de aire.
    • Usar ropa con poco o mucho aislamiento térmico.
    • Ingerir líquidos antes, durante y tras la exposición al sol, en mayor cantidad y de forma frecuente.
    • Evitar el consumo de alcohol y bebidas estimulantes.

2. Humedad:

    • Eliminar las fugas de vapor y de agua.
    • Encerrar las superficies enfriadas por evaporación de agua y el sistema de enfriamiento.
    • Usar ropas impermeables al agua (waterproof) pero permeables al vapor, a fin de permitir la evaporación del sudor.

3. Radiación térmica:

    • Reducir las superficies radiantes.
    • Colocar pantallas reflectantes.
    • Aislar o tratar las superficies radiantes.
    • Situar los puestos de trabajo fuera de superficies radiantes.
    • Usar ropa de protección especial que refleje la radiación.
    • Utilizar crema de protección solar.

4. Corrientes de aire:

    • Reducirlas o eliminarlas.
    • Colocar pantallas que protejan de las corrientes.
    • Situar los puestos de trabajo fuera de las corrientes.

5. Carga física del trabajo:

    • Mecanizar el trabajo.
    • Reducir los movimientos en el trabajo y la velocidad de los mismos.
    • Reducir los desplazamientos.
    • Reducir los esfuerzos.
    • Mejorar la postura.

6. Ropa:

    • Mejorar el diseño de la ropa.
    • Seleccionar tejidos y materiales idóneos.
    • Buscar tejidos y materiales ligeros.
    • Utilizar gorra o sombrero de ala ancha, refrescándose de vez en cuando con agua.
    • Utilizar guantes.

7. Organización del trabajo:

    • En épocas más calurosas, reducir el tiempo de exposición al sol, tratando de evitar la franja horaria comprendida entre las 12 y las 17 horas. En épocas de frío, realizar los trabajos al aire libre en las horas de mayor exposición solar.
    • Realizar a primera hora las tareas que requieran mayor esfuerzo.
    • Planificar descansos de forma periódica en lugares sombreados.
    • Realizar pausas y descansar siempre que sea necesario.
    • Programar rotaciones para realizar tareas que supongan un especial esfuerzo físico o un mayor riesgo, limitando el tiempo de permanencia en ellas.